Made in Spain, moda que traspasa fronteras de nuevo

Por José Luis Maseda

Sabido es que la moda puede hacerte viajar debido al exotismo de las materias, la exquisitez que resulta de una mente creativa inspirada por lugares lejanos o la artesanía venida de lejos y reflejada en algunas piezas. Pero en esta ocasión te voy a hablar no de moda que te hace viajar, sino de moda que viaja ella misma y que además llegará muy lejos. ¿Te apetece saber más?

Después del éxito que consiguió la primera edición el pasado año, ACME, la Asociación Creadores de Moda de España decidió muy inteligentemente repetir la experiencia organizando la acción “Made in Spain: la mode au-delà des frontières” en la Embajada de España en París.

 

Durante los pasados días 15 y 16 de abril el inmejorable marco de la residencia del Embajador de España acogía de este modo diversas piezas representativas de las colecciones de otoño-invierno 2015-16 de los mejores diseñadores y firmas españoles, como son los siguientes:

Manolo Blahnik, Loewe, Adolfo Domínguez, Agatha Ruiz de la Prada, Ailanto, Amaya Arzuaga, Ana Locking, Ángel Schlesser, Andrés Sardá, Anton Heunis, Custo Barcelona, Davidelfin, Devota & Lomba, Duyos, Dolores Cortés, Etxeberría, Francis Montesinos, García Madrid, Hannibal Laguna, Helena Rohner, Ion Fiz, Jorge Vázquez, JuanVidal, Juana Martín, Juanjo Oliva, Maya Hansen, María Ke Fisherman, Menchén Tomás, Miguel Marinero, Miguel Palacio, Moisés Nieto, Roberto Torretta, Roberto Verino y Teresa Helbig.

Treinta y cuatro nombres de firmas que comienzan a internacionalizarse o ya afianzadas en el panorama profesional y que engloban lo mejor de la creación de moda española en cuanto prêt-à-porter masculino y femenino, joyería, accesorios, peletería y baño; y que muestran la creatividad, la calidad de confección y la exquisita artesanía que se realiza en España.

Conocidos en francés como Hôtels Particuliers, el Hôtel Wagram o Berthier es un palacete situado en la exclusiva avenida George V parisina, y sede de la Embajada de España desde que el Estado español lo adquiriera en 1920. Decorado con obras del Patrimonio Real donadas por el rey Alfonso XIII, en el edificio se pueden admirar exquisiteces artísticas en 360°: desde las maravillosas lámparas de araña, hasta las espectaculares alfombras tejidas a medida en los talleres de la Real Fábrica de Tapices de Madrid, pasando por los muebles, los tapices de Goya y las sublimes pinturas firmadas por Pantoja de la Cruz, Sánchez Coello, José Llaneces o Federico de Madrazo.

Si ya de por sí el contexto que te acabo de describir merece la pena la visita, el evento que nos ocupa reunió además a numerosas y selectas personalidades de la moda y la cultura. Recibidos por Don Ramón de Miguel (Embajador de España en Francia), Pepa Bueno (directora de ACME) y los diseñadores Modesto Lomba, Agatha Ruiz de la Prada, Nuria Sardá y Manuel García; los invitados presentes pudimos así observar al detalle las prendas presentadas, y apreciar una vez más el buen trabajo que realizan los diseñadores españoles, que presenten sus colecciones en España, París o Nueva York.

Entre las personalidades allí reunidas se encontraban representantes del mundo de la cultura como la subdirectora general de Promoción de las Bellas Artes, Begoña Torres; el director del Museo Galliera (museo de la moda de París), Olivier Saillard o la historiadora de moda Miren Arzalluz. También estaba presente la prensa francesa especializada en moda de medios como Elle, Biba, Madame Figaro, Le Nouvel Observateur, Paris Match y France TV; importantes compradores de las conocidas Galeries Lafayette o de Le Bon Marché, responsables de las recurrentes ferias Who’s Next y Première Classe, delegados de escuelas de moda francesas así como miembros de la Fédération Française de la Couture quienes mostraron el interés y el apoyo a la Marca España.

Una iniciativa que piensa establecerse anualmente y que permite exhibir lo mejor de la moda patria en Francia para dar a conocer el talento creativo y resultados dentro de la industria, y fomentar el intercambio y las relaciones en el mercado francés para que la moda española llegue todavía más lejos.

Con proyectos así de positivos, solo me cabe agradecer el haberme hecho partícipe y decir algo muy nuestro: ¡Olé!