lunes, 31 de octubre de 2011
Saca las Uñas
viernes, 28 de octubre de 2011
XXVIII-X-MMXI
jueves, 27 de octubre de 2011
Crónica de París
martes, 25 de octubre de 2011
"Light Switch" Wicker Park Soundtrack
Al fin un poco de prenda sobre prenda. ¡¡Ha llegado el otoño!!
lunes, 24 de octubre de 2011
Agenda del 24 al 30 de Octubre
domingo, 23 de octubre de 2011
Emporio conquista Barcelona
sábado, 22 de octubre de 2011
Journées Particulières
Journées Particulières, LVMH.
París, 15 & 16 octubre 2011.
José Espronceda cantaba en su Canción del Pirata aquello de : « Con cien cañones por banda, viento en popa, a toda vela, no corta el mar sino vuela, un velero bergantín… ». Haciendo uso de su palabra, pero transformando el todo a mi contexto, confieso que hoy he sido pirata y me he hecho con uno de los grandes tesoros de la Moda, así en mayúsculas, la Maison Dior.
Y es que te explico ahora mismo.
El fin de semana del 15 y 16 de octubre, el grupo financiero de lujo francés LVMH (Louis Vuitton Moët Hennesy) ha decidido muy acertadamente celebrar las « Journées Particulières », dos días en los que tanto en París como fuera de la capital francesa se han podido visitar las sedes, laboratorios, talleres, bodegas o fábricas de la casi totalidad de las firmas que lo componen.
Esto es, y entre muchos otros grandes nombres del lujo, marcas de relojería y joyería como Tag Heuer y Bulgari, bodegas como Veuve-Clicquot o Moët-Chandon, firmas de cosmética y perfumería como Make Up Forever y Guerlain o casas de moda como Céline, Givenchy, Louis Vuitton y Dior.
Así que decidido yo también a satisfacer un poco más mi necesidad de moda, me dirigí el sábado temprano al número 30 de la prestigiosa Avenue Montaigne parisina, sede de los talleres creativos y de costura de la Maison Dior.
La visita no necesitaba inscripción previa, y la apertura de puertas sería a las diez de la mañana en punto, con lo que creí lógico, visto el éxito de cualquier convocatoria moda en esta ciudad, acercarme mucho más temprano. Y allí me planté a las 08h45.
Aquí es donde retomamos la canción de Espronceda, que en mi versión vendría a decir algo así como: “Con cien montones de personas en la banda, el viento sopla, un frío que pela, no corta nada mal sus telas una firma de postín ».
A esas horas, bajo un sol reluciente (algo ya insólito en París), pero unos 10°C de frescor, la cola de gente esperando era algo increíble. Desde el punto en el que me encontraba yo, unas inteligentes pancartas indicaban que el tiempo aproximado de espera sería de unas dos horas, en plan parque de atracciones. Y la gente seguía llegando, y la fila seguía serpenteando por las calles del chic quartier parisino. Y más, y más.
Lo de las dos horas de espera del panel, sería algún tipo de alusión mitológica, porque de real tuvo muy poco. Conforme te acercabas a la entrada, unas azafatas estéticamente sacadas del escaparate de la tienda te entregaban una invitación con la hora estimada de tu visita. En mi caso, las 12h15. Es decir, tres horas y media después de mi llegada. Afortunado me siento al saber, que aquellas personas que llegaron a la cola a partir de las diez de la mañana, tenían por delante unas siete horas de espera. Ni más ni menos.
Pero la pasión por el medio y el amor a la profesión hacen pasar el tiempo rápidamente. Y al fin y al cabo, el frío viento glaciar conserva la piel. Pues eso.
Una vez dentro del edificio Haussmaniano en el que se encuentra la firma Dior, la visita guiada en grupos de quince personas empieza con una breve introducción sobre la casa y la exposición en la que te indican muy claramente que el uso de cámaras de fotos o de cualquier otro tipo está terminantemente prohibido, así que desafortunadamente no he podido conseguir material suficiente para que tus ojos puedan disfrutar tanto como lo hicieron los míos, y he de decirte que el poder ver tan cerca algunos de los modelos de alta costura más representativos de la firma es algo sencillamente impresionante.
La rápida visita (unos 30 minutos en total aproximadamente) transcurre no por los verdaderos espacios de trabajo de Dior (talleres y demás, secreto profesional obliga), sino por incontables salas en las que se han preparado unos escuetos pero eficaces stands recreando el ambiente de cada departamento de la firma. Con la persona responsable del mismo, y algunas de las manos artistas en cada uno de ellos, el recorrido te invita a conocer…
La sastrería masculina.
Breves puntadas en directo para descubrir el entramado de los trajes masculinos de la firma, en los que entre el tejido y el forro se crea una sucesión de hasta tres capas de entretelas en lino y crin de caballo para estructurar y dar la rigidez necesaria a las chaquetas que lucen impecablemente en cualquier percha, maniquí o afortunado cliente que se las ponga.
El taller de calzado femenino.
Partiendo del dibujo en papel del diseñador, el taller de calzado tarda unas doce horas por par de zapatos en dar forma a los sueños del mismo, y de tantas mujeres que desearían subirse a tales ejemplos del buen hacer para los pies.
El montaje de marroquinería.
Un « Lady Dior » montado ante tus ojos es un espectáculo digno de admiración. Materiales nobles (cuero, piel de cocodrilo, pitón…) y remaches metálicos exclusivamente realizados en plata, oro y oro blanco, explican el éxito de este modelo de bolso a través de los años.
El taller de alta costura.
Aquí el placer de la visita te puede desbordar las venas. Al menos en mi caso.
Una más que agradable première main d’atelier (jefa de taller) te explica con la pasión que desprende por su trabajo, el proceso detallado de la creación de un modelo de alta costura, desde el boceto del diseñador (en ningún momento se habló de Galliano) hasta el primer prototipo o « tarlatane » (realizado en tejido tarlatán, de algodón), que se hace directamente sobre maniquí y que una vez modificado y adaptado a las sugerencias del creador se transforma en patronaje sobre papel, antes de cortarlo en el tejido definitivo. A partir de ahí, alguna de las modistas del equipo se encargará, de principio a fin, del acabado del modelo. Un vestido normal, que no necesite muchas modificadiones, será confeccionado tras una media de entre 280 y 360 horas de trabajo. Todo a mano. Todo.
El taller de bordados.
La increíble destreza y rapidez con la que las manos de las bordadoras realizan su trabajo es solamente comparable al impresionante resultado final. Los tejidos son recubiertos con una capa de plástico fino en la que se dibuja el trazado del bordado y el tipo de abalorios a coser. Una vez terminada la obra, ese plástico desaparece al lavar el tejido con agua. Si el tejido, en cambio, es muy delicado y no resiste el lavado, la finísima capa de plástico se quita a mano y con pinzas de depilar. Truco de artesano que añade horas de trabajo.
El taller de alta relojería y joyería.
Impactante la delicadeza con la que las manos de los artistas relojeros y joyeros taladran los materiales preciosos (cerámicas, diamantes, circonitas, zafiros, rubíes…) ante la atónita mirada del visitante y los montan y desmontan para demostrarte su labor con tanta precisión que te dan ganas de aplaudir. Ver la creación del reloj N°VIII con la corona de diamantes, o ver la fabricación desde el molde de cera hasta la incrustación de esmeraldas del anillo rosa creado por Victoire de Castellane (diseñadora de las joyas Dior), no tiene precio. O sí, muchísimo.
El gabinete de creación de maquillage.
Junior, en compañía de Yen, quienes forman parte del equipo de Tyen (responsable de la cosmética Dior) te explican los detalles de la creación de los productos de maquillage de la casa, y demuestran en vivo, en un decorado representando el backstage de un desfile, porqué son los responsables del gabinete al maquillar en un momento a dos modelos de una belleza tal que ya de por sí no necesitarían ningún retoque. El resultado, por supuesto, espectacular.
El laboratorio de perfumería.
Poison, J’adore, Farenheit, Lady Dior, Hyptonize… tantos nombres conocidos en la perfumería y todo el abanico olfativo de muestras a tu disposición para crear y recrear los olores tan característicos y tan históricamente valorados por Christian Dior, el fundador de la marca.
Al pasar la media hora, con la visita terminada, y habiéndote quedado con ganas de (mucho) más, el personal del equipo de Dior, te acompaña hacia la salida despidiéndose, no sin antes regalarte una miniatura de uno de sus perfumes y el más que interesante catálogo de estas « Journées Particulières ».
Desde luego, más que nunca, sólo puedo decir « Dior, j’adore ».
viernes, 21 de octubre de 2011
Fashion Insiders ARMIN HILDEBRANDT
Nombre: Armin Hildebrandt
Profesión: Empresario de Moda
1-¿En qué consiste tu trabajo?
Propietario de una tienda de zapatos y complementos de lujo para hombre.
2-¿Cómo aterrizas en el mundo de la moda?
Empecé en el año 87, trabajando a tiempo parcial en la fabrica de blusas que tenía mi tío; mientras estudiaba arquitectura de interiores.
3-¿Cuánto tiempo llevas dedicado a ella?
24 años
4-Cosas que has descubierto a través de tu trabajo y no esperabas encontrar.
Lo que la gente puede llegar a hacer por tener un it de moda
5-Lo mejor de la labor que desempeñas es....
La selección del producto y el trato con los clientes.
6-Lo más duro....
La parte financiera
7-Retos que parecían imposibles y lograste poner en marcha en Le Marché aux Puces.
El abrir un espacio dedicado solamente a accesorios y zapatos de hombre.
8-¿A qué tipo de presión estáis sometidas las tiendas multimarca?
Presión ninguna, pero estamos obligados cada 6 meses a buscar las piezas claves de cada colección y compaginarlos con la realidad de la calle
9-¿Cómo se hace para ser un referente en tendencias y moda masculina en tan poco tiempo?
Por un lado el espacio que he creado y por otro la selección de marcas, también que en Madrid es la única tienda dedicada a complementos y zapatos para hombre
10-¿Nos explicarías cual es el proceso para cargar una tienda con todo lo necesario para cubrir seis meses?
Primero decidir los diseñadores que quiero visitarlos con un 7 meses de antelación de antelación y después hacer la compra en función de las necesidades de la tienda ( 60% zapatos 25% bolsos 15% accesorios )
11-Habéis introducido eventos pop up store como el celebrado junto a Tommy Hilfiger ¿De dónde surge la idea?
Me llamaron de Tommy Hilfiger a través de su agencia de comunicación en España ( FINALLY PRESS ) por que les encajaba lo que iban a presentar con el producto y el espacio de la tienda
12-¿Qué nos ofrecerá vuestra tienda en este próxima temporada otoño/invierno 2011-12?
En esta temporada del mocasin transgresor de Balenciaga al mocasin clásico que ha surgido de la colaboración de Tommy Hilfiguer con Bass,las botas con suela de goma gruesa de Krisvanassche los pañuelos de Ricardo Tisci para Givenchy, los derby de suela corrida en blanco de Commes des GarÇonsy los complementos de Dries Van Noten.