Nada me gusta más que la
llegada del buen tiempo, cuando la luz se hace más presente y duradera y cuando
los colores resaltan por todos lados como en aquella popular canción que decía que la vida es una tómbola de luz y de color.
Pues bien, hoy en mi tómbola… ¡tachán, tachán! le ha tocado ganar a la maison Ungaro, y puedo decirte que es un
éxtasis visual de colorido. ¿Quieres ver más?
Y lo bueno es que Puglisi ha sabido reinterpretar el espíritu de esa tan engalanada casa de costura en un glamour bastante contemporáneo (los tocados de plexiglás obra del sombrerero Stephen Jones son solo un guiño).
Ahora que la filosofía global
de la moda se está transformando en “queremos
vender y punto” por encima del legendario “queremos vender que es lo que toca, pero haciéndote primero soñar”,
resulta que aparece esta cuarta colección del italiano para Ungaro y te dan
ganas de darle las gracias y un abrazo. De verdad.
Se abrió (y también cerró)
el show con vestidos de diva del Hollywood mítico en colores saturados y poco a
poco fueron apareciendo siluetas perfectamente femeninas y seductoras, sin
necesidad alguna de excentricidades, o ese punto de vista masculino que tenemos
de querer que “enseñéis cacho” (que también gusta, por qué no decirlo).
Prendas amplias y muy
fluidas entre las que se encontraban faldas capa, vestidos gigantescos,
pantalones al estilo pijama masculino, sudaderas así como algunas blusas de
mangas despegadas… todo orquestrado por Puglisi y ayudado en la labor por la
estilista Arianne Phillips (que ha vestido entre otros a Madonna), y quien
amadrinó el maquillaje escogido tan de cabaret (máscara de pestañas intensa,
rojo en los labios, azul en los párpados). Para verme bonita me pinto de azul
que decía aquella… solo que en este caso funciona.
Quizás al detalle las
prendas no tuviesen el exquisito acabado al que Ungaro tenía tanto apego y
puede además que lo novedoso no fueran las
prendas en sí, porque al fin y al cabo las siluetas o patronaje no eran de lo
más vanguardista, pero los tejidos (sedas, muselinas, encajes, punto), los
estampados y la fuerza de la paleta de colores escogida hicieron que la nueva
versión de algo tan clásico consiga el efecto buscado y, sin apenas accesorios,
resulte moderno. Validamos.
Lista para el color!!!
ResponderEliminarEso de "enseñar cacho" me ha gustado jajaja.
ResponderEliminarUna colección muy explosiva en color!
Besos :)