Tailoring Masculino

Ir a trabajar con traje de chaqueta o sin traje de chaqueta, esa es la cuestión.

Muchos os hacéis esa pregunta, si es conveniente o no ir a trabajar con traje chaqueta, y yo la verdad es que me pongo en vuestro lugar y si fuese hombre lo vestiría todo el tiempo, como si se tratase de un uniforme o el chándal del cole. Porque una vez has dado con tu propio gusto para vestirlo, las posibilidades de estilos y looks son infinitas, y los quebraderos de cabeza mínimos. Por eso me encantaría enfundármelo, por no tener que sentarme cada mañana frente al armario y repetirme el consabido "no tengo nada que ponerme".

En cambio, por lo que suelo ver, creo que algunos de vosotros no compartís opinión, y el traje se os antoja como una pereza máxima en la que os sentís encasillados a la espera de que llegue el viernes ese de "free style" donde sacáis a relucir vuestra auténtica personalidad vistiendo. Y entonces es cuando opino que ese día nunca debería haber existido. Mejor en traje.

Por ello y porque sobre todo encuentro que las generaciones más jovenzuelas están un tanto perdidas a la hora de iniciarse en el interesante mundo del traje de chaqueta, aquí, un detallado catálogo de cómo ser el más elegante (y cool) de la oficina en cinco pasos ineludibles.

-LOS TRAJES-

Una vez sabido que a tu puesto de trabajo, o a las entrevistas que te acerques, el traje chaqueta va a ser obligatorio, ten en cuenta algunas premisas que te ayudarán a marcar la diferencia.

1- Que te quede como un guante. No vale utilizar el traje que tenías antes de adelgazar/engordar, del cual te sobra por aquí, y te falta por allá. Ese lo puedes descartar de inmediato. Mira, ya tienes más sitio en el armario para uno que te quede perfecto.

2- Llévalo limpio y bien planchado. Que no se note que la última vez que lo utilizaste fue para ir a la boda de tu prima Pili. Una tintorería lo dejará como nuevo.

3- Que se tuyo, en propiedad. Ni el de tu padre de hace unos años ni el de tu hermano mayor de cuando se graduó. Este es el punto en el que más suelen pecar los veinteañeros que cursan un Máster en escuelas de negocio y van el finde con el traje de "prestao". Pobrecicos míos y lo que parecen. ¿No os enseñan a hacer buenas inversiones? Aquí tenéis una fantástica por menos de 150€ donde os podéis hacer con uno, mirad.

-OTRAS COMBINACIONES-

Marca tu propia personalidad a la hora de vestirlo y combínalo en tu propio estilo. No hay nada de malo por llevarlo con una camisa negra, con un jersey o un chaleco. Además es un modo de sacarle mayor partido a cada uno de tus trajes y hacer que cada día parezcan diferentes. 

Para adquirir nociones al respecto, si no se tienen, es conveniente estudiar lo que ocurre en tendencias masculinas para ir sobre seguro.

-LA CAMISERÍA-

La variedad de camisas te va a permitir ir perfecto, y darle el toque impoluto a tu look. Siempre y cuando no estén amarilleadas por el paso paso del tiempo (sobre todo en la zona del cuello), deterioradas o manchadas en las zona de las axilas (por el sudor y uso de desodorantes) o arrugadas. La plancha es ese elemento que mediante calor se consigue hacer desaparecer las arrugas del tejido. A parte de conectarla al enchufe, es obligatorio pasarla por encima del tejido en cuestión.

Marca una prioridad e invierte renovando tus camisas con una blanca básica, una azul y otra, por ejemplo, de cuadritos. Aquí, tienes muchos más modelos.

-LOS PANTALONES-

El cruce y hombreras de una chaqueta y los pantalones, son la mayor fuente de información para saber de cuándo y de qué tendencia es el traje que llevas. Recuerdo, ahora se llevan con el denominado "slim fit", es decir, bastante ajustados. Favorecen sobre todo a hombres que tienen una complexión de pierna delgada. Abstenerse los amantes del fútbol o el culturismo. No todas las modas son para todos.

-EL CALZADO-

Por último, se debe rematar correctamente el conjunto con los zapatos. Porque hay vida más allá del clásico oxford o los castellanos, mira estas opciones tan juveniles que sería combinar tu traje con las nuevas versiones del zapato oxford, bien con suela de goma o abotinados, o bien, llevar unas zapatillas deportivas súper molonas.

¡¡Listo para ser el chico más guapo de la oficina!!

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